Tu ausencia me enferma el corazón, el no saber quien eres ni donde estas ni como eres, mi pedazo de cielo, mi ángel; pierdo la vida día a día, la esperanza se disemina lentamente, la luz es cada vez mas tenue, los años pasan y van dejando una implacable marca de soledad, miro la lluvia a través de mi ventana, observo el amanecer y el atardecer, miro mi cama, me percato que no hay nadie, tampoco tengo recuerdos de haber vivido una noche apasionada, aunque si así hubiese sido, la tranquilidad de las sabanas me hubiese mostrado la verdadera realidad…
Me pregunto miles de veces, no he sabido buscar, o no he aprendido a dejarme encontrar, mi amor, sea donde sea que estés, hipnotízame y dame a cargo tu cuidado, en garantía dejaré mi corazón en tus manos, 26 largos años ya han pasado, he probado la dulzura, una dulzura que voló lejos, tan lejos que se perdió en el universo, mire las estrellas, son millones pero tan solo quiero alcanzar una, se que quizás el amor es eterno mientras dura, pero quiero vivir ese sueño en esta vida, no ser sueño de vida, una lenta canción acompaña mis escritos, una lenta melodía que hace vibrar mis manos, una melodía que hace que mis ojos se humedezcan y brillen a la luz, una melodía que desacelera mi respiración, me hace pensar, me coloca a soñar nuevamente, ojalá que no vuelva a dormir nuevamente acompañado de mis propios sueños, espero algún día publicar en esta misma página lo feliz que soy, compartir mi dicha al mundo y al haber encontrado la llave de la felicidad, enseñarle a cada ser como utilizarla, basta que un solo individuo tome casi toda su juventud para descubrirla, el resto no necesitara tomarse tan amargo tiempo.
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